Cervezas: Leffe Brune

-País. Bélgica

-Tipo: Dubbel

-Graduación: 6,5º

-Cervecera: InBev

La historia de la cerveza Leffe se remonta al siglo XII, cuando los cánones de la Orden de Canónigos Premonstratenses de la Abadía de Nuestra Señora de Leffe comenzaron a elaborar cerveza. La abadía se encuentra en la ciudad de Dinant, en Bélgica, y fue fundada en 1152.

Los cánones de la abadía elaboraron cerveza para su propio consumo, así como para venderla a los viajeros que pasaban por la abadía. La cerveza Leffe se hizo rápidamente popular, y se convirtió en una de las cervezas más conocidas de Bélgica. La abadía con el paso de los siglos tuvo que soportar  una inundación y un incendio pero nada detuvo la fabricación de esta maravillosa cerveza, hasta que llego la revolución francesa y la abadía fue abandonada, los monjes siguieron fabricándola a escondidas pero solo en pequeñas cantidades para ellos mismos. Con el tiempo el abad Nys, se asocio con el cervecero Albert Lootvoet para elaborar diferentes tipos de cervezas y mejorar su distribución, hasta que la cervecera fue comprada por Interbrew que ahora mismo es conocida como la gigante AB InBev, la cervecera mas grande del mundo.

En su etiqueta destaca el dibujo bonico de  la Abadía de Nuestra Señora de Leffe, o simplemente la abadía de Leffe, es un monasterio de la Orden de los Premonstratenses, ubicado en Leffe, un distrito de Dinant en Bélgica, en la margen derecha del río Mosa.

La abadía fue fundada en 1152 por Enrique IV, duque de Luxemburgo, quien donó la iglesia de Leffe a los monjes premonstratenses de la abadía de Floreffe. Los monjes comenzaron a elaborar cerveza en la abadía en el siglo XII, y la cerveza Leffe se convirtió rápidamente en una de las cervezas más populares de Bélgica.

La Leffe Brune se elabora mediante un proceso de fermentación doble. La primera fermentación se lleva a cabo en cubas abiertas, con levadura de alta fermentación. La segunda fermentación se lleva a cabo en botellas, con levadura de baja fermentación. Tiene un color marrón oscuro, con reflejos rojizos. La espuma es densa y cremosa. Al tomarla se perciben notas de malta tostada, caramelo, frutas pasas, junto a aromas afrutados a plátano y frutas maduras. En ella se encuentran sabores especiados y una agradable fragancia alcohólica. En boca resulta plena, con cuerpo, de amargor ligero, un final sedoso y dulce. 

La Leffe Brune es una cerveza versátil que se puede maridar con una amplia variedad de platos. Se recomienda maridar con platos de carne, como asados, estofados y carnes rojas. También se puede maridar con platos de queso, como quesos curados y quesos azules.

La Leffe Brune se sirve en una copa tulipa. La copa tulipa ayuda a preservar la espuma y a concentrar los aromas de la cerveza.