-País. Bélgica
-Tipo: Witbier
-Graduación: 4,9
-Cervecera: InBev
Nos encontramos con una
cerveza con mucha historia y siempre ligada a Hoegaarden, pueblecito homónimo
situado a 45 Km de Bruselas y con una tradición en la elaboración de la cerveza
de trigo que se remonta a 1318.
Hoegaarden fue creada por una
comunidad de monjes en 1445, la tradición de la abadía se extendió al pueblo y
a principios des S XIX habían allí 30 brasseries y 9 destilerías. La tradición
se perdió tras la 2º Guerra Mundial, y no fue hasta 1965 cuando se recupero la
tradición cervecera en este pueblo a manos de Pierre Celis, lechero de
profesión, fundo una fabrica, Cloister, pero en 1985 sufrió un incendio y tuvo
que parar la cervecera.
Ocurrió que la gigante Interbrew,
la que mas adelante se fusionaría con la brasileña Ambev para formar InBev, se
fijo en el y le ayudo a reconstruir la fabrica a cambio de convertirse este en
accionista mayoritario, cosa que a la larga pago Celis, ya que una discrepancia
en la variación de la receta para hacerla mas comercial haría que Celis los
abandonara y fundase su propia cervecera en EEUU y seguir allí con la receta original.
InBev en 2005 cerro la
fabrica en Hoegaarden y la traslado a Jupille, Lieja, pero no lo hizo de forma
permanente y en 2007 decidió mantener la producción en Hoegaarden e invertir 60
millones de euros en remodelar la vieja fabrica.
Esta cerveza de trigo o
witbier presenta un color blanquecino con aspecto turbio, es de fermentación
alta y ni se filtra ni se pasteuriza y tiene una doble fermentación en botella.
Su espuma es muy blanca y densa y todavía contiene levaduras vivas.
Es aromatizada al cilantro
con notas de naranjas y olor a lúpulo.
Su sabor tiene una entrada
amarga seguida de un cuerpo ligero y afrutado, tiene buen cuerpo pese a su
escasa gasificación aunque tiene un sabor menos intenso que otras cervezas de
trigo.
Se recomienda servir poco,
esperar y agitar la botella y terminar de servir, las características que tiene
hace que cada trago tenga matices propios.
La Hoegaarden se sirve
tradicionalmente en un vaso hexagonal para reducir el numero de superficie de
vidrio que toca la mano y así evitar que el calor se transfiera a la cerveza.